El sistema de Ciencia, Tecnología, Conocimiento e Innovación (CTCI) en Chile y el mundo ha evolucionado con el tiempo, y resulta relevante analizar sus fortalezas y debilidades. En el contexto de la calidad de resultados de investigación, destaca un reciente artículo publicado en la Revista Chilena de Historia Natural por Francisco E. Fontúrbel y Juan L. Celis-Diez, el cual aborda el tema de las revistas depredadoras, enfocándose especialmente en el impacto potencial de las publicaciones de la editorial MDPI sobre la calidad de la producción científica en Chile.
Las cifras presentadas en el artículo llaman particularmente la atención. Entre 2017 y 2022, el porcentaje de artículos científicos publicados en Chile en revistas MDPI creció de un 1% a un 13%, alcanzando un 10% en 2023. En el mismo período, las universidades chilenas muestran variaciones significativas en el porcentaje de publicaciones MDPI: desde un 6% en instituciones como la Pontificia Universidad Católica de Chile y la Universidad de Chile, hasta un 19% en la Universidad de Antofagasta, con un 9% registrado en la Universidad de Concepción.
Si bien estas cifras no serían preocupantes por sí solas, surgen dudas en torno a la calidad de las publicaciones de ciertas revistas MDPI. En varios países, como Noruega, Finlandia, Dinamarca y los Países Bajos, los artículos publicados en revistas MDPI han dejado de ser considerados válidos para procesos de contratación y evaluación de productividad científica, argumentando que podrían no reflejar estándares de calidad adecuados.
Estas inquietudes se fundamentan en las prácticas editoriales de MDPI, que incluyen:
- Tiempos de publicación acelerados, favorecidos por plataformas en línea altamente expeditas.
- Alto número de ediciones especiales que reúnen trabajos de temáticas similares, aumentando las autocitaciones y los factores de impacto.
- Ampliación de la red de editores, incentivados con la oferta de publicar un artículo de forma gratuita y recibir cupones canjeables por el costo de futuras publicaciones.
Estas prácticas pueden derivar en un sistema que comprometa la integridad del proceso de revisión por pares, un pilar fundamental de la ciencia. Esto es especialmente preocupante en Chile, donde el sistema de acreditación universitaria prioriza la cantidad de publicaciones más que su calidad, lo que puede incentivar a investigadores jóvenes a integrarse al modelo de «editores invitados» para obtener acceso gratuito a sus propias publicaciones. Este ciclo, aunque tentador, podría sacrificar la calidad científica en favor de resultados rápidos y económicos.
Cabe destacar que, aunque las revistas MDPI no han sido oficialmente catalogadas como «depredadoras», el artículo pone en alerta sobre sus métodos editoriales. Asimismo, el alto costo de publicación en revistas científicas tradicionales podría estar alimentando el auge de modelos como el de MDPI, dado que muchos investigadores enfrentan dificultades para financiar sus publicaciones en journals tradicionales.
El artículo concluye enfatizando la importancia de destinar los recursos públicos chilenos hacia publicaciones de alta calidad, asegurando que los fondos públicos respalden investigaciones que aporten valor real al conocimiento científico.
En definitiva, la situación es compleja. Probablemente existen revistas MDPI que mantienen estándares de calidad, así como otras que podrían no hacerlo. La discusión apunta a equilibrar las exigencias de consolidar carreras científicas con los intereses económicos, tanto de editoriales tradicionales como emergentes que adoptan modelos como el de MDPI. Esto subraya la necesidad de proteger los principios del sistema científico: tiempo para el análisis y reflexión y para la creación científica, rigor metodológico y evaluación crítica de pares.
Ronald Mennickent Cid, Director de Investigación y Creación Artística Andrea Rodríguez Tastets, Vicerrectora de Investigación y Desarrollo