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Los representantes UdeC visitaron diversas instituciones del ecosistema de innovación y emprendimiento del país norteamericano para abordar instancias de colaboración y conocer cómo están enfrentando desafíos en transferencia del conocimiento, emprendimiento y escalamiento de tecnologías.
En busca de nuevos espacios para escalar las tecnologías desarrolladas por investigadoras e investigadores de la Universidad de Concepción, hace algunos días, una comitiva de la Oficina de Transferencia y Licenciamiento (OTL) en compañía del director de Desarrollo e Innovación Dr. Jorge Carpinelli Pavisich, se trasladó a México para participar en una serie de encuentros y visitas a dieciséis instituciones ligadas al emprendimiento y la innovación, entre empresas, parques tecnológicos y centros de investigación.
“Este viaje se enmarca en mi caso en el proyecto FIUF (Fondo I+D+i Universitario Frontera) que la Universidad de Concepción está impulsando para diseñar, en un horizonte de diez años, un plan de acción que nos consolide como una universidad de frontera en investigación e innovación”, comentó el directivo.
Recogiendo aprendizajes y explorando oportunidades
La gira -que contempló actividades en Ciudad de México, Monterrey y en ciudades del estado de Guanajuato- se alinea con los objetivos de la Oficina de Transferencia y Licenciamiento (OTL) de la UdeC, explicó su directora ejecutiva Andrea Catalán Lobos.
“En la Universidad Nacional Autónoma de México, visitamos sus laboratorios para explorar escalamientos de nuestras tecnologías y, además, centros de investigación donde conversamos sobre las empresas de base tecnológica, porque nos interesa saber qué están haciendo ellos, cómo las están apoyando”, detalló Catalán quien, también en la capital mexicana, dictó un módulo para la Academia de Gestores Tecnológicos, en representación de la Red GT de Chile.
La directiva explicó que las diversas reuniones y actividades en que participaron fueron oportunidades para dar a conocer el Portafolio de Tecnologías Comercializables UdeC, para que sus pares mexicanos tuvieran la posibilidad de explorar “qué soluciones nuestras les podrían ser útiles a empresas o a sectores productivos de allá”.
En ese sentido, destacó que “en el Tecnológico de Monterrey surgió la posibilidad de participar en forma conjunta en desafíos que tienen las empresas porque a ellos les llegan muchos desafíos que, muchas veces, no saben cómo abordar, entonces, podríamos hacerlo de forma conjunta, por ejemplo, en el ámbito aeroespacial, donde se podría aprovechar la experiencia que la UdeC ya tiene en el área”.
El Dr. Carpinelli destacó que, en Monterrey, accedieron a conocer en detalle “los mecanismos del Tecnológico para crear empresas de base científico-tecnológica, su modelo de apropiación y participación en ellas, y cómo impulsan el acceso a fondos de inversión y su internacionalización, además de su estrategia formativa para cultivar una cultura emprendedora entre estudiantes de pre y postgrado”.
“Esta experiencia es invaluable”, afirmó el director, “ya que nos permite recoger buenas prácticas para fortalecer nuestros propios instrumentos de apoyo al emprendimiento”.
Probióticos y economía circular
Un ejemplo de transferencia tecnológica que surgió naturalmente en varias de las conversaciones en México fue la licencia otorgada por la UdeC a Liva Company para la fabricación del suplemento alimenticio NUP PyloriOff, en base a la investigación científica de más de 20 años liderada por la Dra. Apolinaria García Cancino de la Facultad de Ciencias Biológicas. “Ellos sabían de esto y les interesa tener la licencia para llevar el producto al mercado mexicano”, detalló Andrea Catalán.
En Guanajuato, en tanto, la comitiva identificó oportunidades de cooperación en el ámbito de la economía circular y revalorización de residuos. “Ellos tienen una industria manufacturera muy grande e intensiva y les preocupa los efectos que tiene en el ambiente, tienen problemas de contaminación, y les comentamos algunas de las experiencias que tenemos acá y se mostraron muy interesados en poder desarrollarlas”, detalló.
El Dr. Carpinelli agregó que, en este lugar, “apreciamos el sólido ecosistema público-privado de innovación, donde grandes empresas tractoras han impulsado una red de proveedores tecnológicos y talento calificado, lo que ofrece aprendizajes muy relevantes para nuestro contexto regional”.
Sinergia academia e industria
En la gira también participó el gestor tecnológico de la OTL Nicolás Troncoso León quien destacó “la madurez del ecosistema de emprendimiento tecnológico” de México y enfatizó el rol que cumplen en ello las universidades, que, sostuvo, “destacan por sus políticas claras y programas de acompañamiento y entrenamiento para sus spinoffs, lo que impulsa significativamente la creación de nuevas empresas basadas en la investigación”.
En otro aspecto, Troncoso enfatizó que en México han sido eficientes en la reconversión de las actividades de investigación hacia los desafíos de la industria, en que, sostuvo, “un claro ejemplo es Guanajuato, una región con una sólida tradición en la industria del calzado que ha logrado transformarse en un polo automotriz relevante. Este cambio ha traído consigo un evidente desarrollo en robótica, demostrando la capacidad de adaptación y el impulso hacia la innovación tecnológica”.
“Esta sinergia entre academia e industria es un modelo a seguir para potenciar la transferencia tecnológica y el impacto de la investigación universitaria”, sostuvo el gestor tecnológico.
